Argumentar en clase de Ciencias naturales es útil tanto para construir conocimientos como para aprender contenidos y desarrollar el pensamiento crítico. Por tanto, la argumentación tiene un papel importante en la adquisición del pensamiento científico y en la formación de comunidades de conocimiento, ya que es preciso reflexionar sobre cómo convencer y cómo responder a otras propuestas o ideas (Molina, 2012).
Asimismo, el razonamiento crítico y argumentativo promueve la alfabetización científica, dado que el alumnado debe comprender y producir argumentos, lo que le va a llevar a ver la ciencia como un medio para conocer. Con todo esto, también se promueve el aprendizaje significativo, el desarrollo de competencias comunicativas, el razonamiento crítico y la comprensión de la cultura (Molina, 2012).
Por otro lado, los estudiantes necesitan disponer de los conocimientos conceptuales, prácticos y de métodos argumentativos suficientes para poder argumentar la base sobre la que efectúan la afirmación, acercándose así a los fundamentos epistemológicos de la ciencia. En definitiva, se trata de desarrollar el pensamiento crítico mediante opiniones y reflexiones sobre el mundo que les rodea, tratando de hacer una evaluación de la evidencia científica (Molina, 2012).
De esta manera, una de nuestras sesiones interactivas de la materia estuvo destinada a realizar un juego de debate, ya que en muchas ocasiones proponemos actividades de debatir, pero sin profundizar demasiado y sin conseguir la participación de todo el alumnado.
Como conclusión, la realización de esta actividad nos ha parecido interesante y enriquecedora, ya que nos ha hecho darnos cuenta de que la participación por parte de todos los miembros del grupo ha estado asegurada, ya que todas hemos dado nuestra opinión y argumentos para llegar, finalmente, a un consenso.
Por lo tanto, creemos que este tipo de actividad funcionaría muy bien con el alumnado de primaria, dado que origina que todos y todas participen de manera activa. Por otro lado, el tema a debatir tendría que ser más cercano y habría que proporcionar información previa para poder argumentar científicamente y no solo con lo que creen que saben.
Finalmente, pensamos que también sería interesante que una vez acabado el debate entre los distintos grupos, además de comparar los acuerdos y desacuerdos a los que han llegado, trataran de debatir entre los grupos, llegando a un consenso global de toda la clase.